El comité —integrado por dirigentes sociales y autoridades— tendrá un rol articulador clave en las etapas que vienen: operará como un puente entre la comunidad, EFE y el municipio, impulsando reuniones periódicas, canales de información y representación activa de los intereses vecinales. Uno de sus principales objetivos es acelerar los plazos del proyecto, inicialmente previsto para después del 2032, pero que ahora se busca poner en marcha en 2031.
Durante la jornada, se destacó el cierre del estudio de prefactibilidad, que incluyó una inédita participación ciudadana. EFE confirmó que el proyecto ahora entra en su etapa de factibilidad, en la que se abordarán aspectos técnicos como estaciones inclusivas, adecuaciones ferroviarias, subestaciones eléctricas y mitigaciones ambientales. Se subrayó también el compromiso con la protección de zonas sensibles como el humedal Rocuant-Andalién y el fuerte La Planchada.
El alcalde de Penco, Rodrigo Vera, valoró la instancia como un nuevo hito en la evolución del proyecto, y realizó un llamado claro: “El desafío es que el 2031 el Biotrén Penco-Lirquén entre en marcha”. Según el edil, el municipio ya está trabajando en la fase operativa del proyecto, integrando diseño, ejecución y evaluación ambiental con una mirada centrada en las personas. En un contexto de crecimiento urbano, el Biotrén se proyecta como una oportunidad histórica para transformar la conectividad y calidad de vida en la comuna.